La comida muy estándar, no acorde con el precio, muy caro para lo que es. Te ofrecen agua en una botellita que te cobran en 125 pesos! Es agua simple….
50 minutos para servir unos molletesfríos y sin frijoles. En lugar de reconocer el error, vienen con el discurso del slow food. E igual con los chilaquiles de mi amiga. Mal servicio, lentos y mamones
Promete más de lo que ofrece. Lugar de amigos pero no atienden bien a todos los clientes. No tenían plato especial de Oaxaca y se dice lugar Oaxaqueño? No vuelvo!