Arriquíbar o Arrikibar es una céntrica plaza de Bilbao, uno de cuyos cuadrantes está delimitado por el edificio de la Alhóndiga, el antiguo almacén de vinos de la villa, obra del arquitecto Bastida.
Recientemente el señero edificio, durante años sin más uso que el de parking provisional, ha sido, por fin, remodelado, dando paso a un centro cultural y deportivo la mar de vistoso.
Pero la plaza es también (o tal vez habría que decir sobre todo) famosa por la llamada “Loca de Arrikibar”, la mujer que incansable hacía punto apostada en uno de sus bancos mientras esperaba, ...
Porque nuestra txirene estaba enamorada de un tendero. Cuentan que aquella mujer, de nombre desconocido, se sentaba a diario frente al comercio de su amado.
En su diseño final, el antiguo almacén se ha integrado en el entrono formando un conjunto urbanístico que crea una continuidad entre a plaza y la Alhóndiga.